El docente deberá ser ante todo, una persona flexible, humana, capaz de acompañar a sus alumnos en este camino de crecimiento y aprendizaje que ellos realizan. Deberá ser capaz de plantear conflictos cognitivos a los alumnos, apoyándolos en la construcción de sus estructuras de conocimientos. También deberá colaborar con ellos para que integren el error como parte del proceso de aprendizaje que está llevando a cabo, impulsándolos a reflexionar sobre la lógica de sus equivocaciones.
Hablar de la transformación del rol del profesor en la era digital, lleva a considerar temas íntimamente relacionados con la vida educativa institucional, entre ellos la tradición y/o innovación, o la misma función de la institución educativa. No se puede ignorar los cambios que se vienen dando a diario con la autopista de la información y ambos, rol del profesor y cambios en la institución, están fuertemente relacionados. Si la llegada de las TIC va a afectar a las formas de enseñanza en las instituciones educativas, entonces el rol de los profesores se verá afectado.
Al desempeñarse el docente en un entorno tecnológico de enseñanza-aprendizaje, sus funciones cambiarán, por lo que es necesario redefinir su tarea profesional y las competencias que debe poseer en el desarrollo de ésta.
La introducción de cualquier Tecnología de la Información y la Comunicación en el contexto educativo pasa necesariamente tanto porque el profesor tenga actitudes favorables hacia las mismas, como por una capacitación adecuada para su incorporación en su práctica profesional.
Es interesante retomar la idea de Cebrian sobre las nuevas competencias del profesorado. Este autor señala que no existe el “supermedio”, es decir, aquel que evitará los problemas del fracaso escolar, aquel que hará que la enseñanza sea de más calidad, y que pueda ser utilizado en todos los contextos y situaciones de clase. Más bien se puede decir que no hay medios mejores que otros, sino que en función de una serie de variables se mostrarán más eficaces para el alcance de unos objetivos concretos o para crear situaciones específicas de enseñanza. Las TICs son simplemente instrumentos curriculares que deberán ser movilizados por el profesor, cuando el alcance de los objetivos y la situación instruccional lo justifique.
Para finalizar es importante destacar que se debe promover la utilización de las computadoras, como herramientas tecnológicas con una finalidad esencialmente pedagógica, orientadora del “saber saber” y del “saber hacer”, con el objetivo de contribuir con el mejoramiento de la calidad de la educación, que permita a las persona, mediante la comprensión de los códigos de las nuevas tecnologías, entender el mundo en que vive, adaptarse activamente a la sociedad y se consciente de que el conocimiento aquí y ahora, es dinamizador del crecimiento y herramienta fundamental para el cambio y la transformación social.

Curso de Posgrado: Profesores en la Res, internet en las aulas
UCASAL

1 comentarios:

MARIA GRISELDA KENNEDY dijo...

Todos los años cuando se publican los resultados de las evaluaciones de los exámenes de ingreso o pruebas de diagnostico en las Universidades, se pone en evidencia el bajo nivel de preparación de muchos aspirantes.

Indudablemente gran parte de la responsabilidad se le atribuye a la formación que se les dio en el Tercer Ciclo de la EGB y la Educación Polimodal (Secundario). No es oportuno en esta presentación cuestionar si los tipos de pruebas y las cuestiones planteadas son las más adecuadas

Cualquiera sea el grado de responsabilidad que le corresponde, es necesario reconocer que la enseñanza media habitualmente se centra en el estudio de los contenidos conceptuales de las asignaturas, en desmedro de la enseñanza de formas de estudiar y las estrategias y procedimientos para apropiarse de las mismas.

Considerando el constante avance de las ciencias que en el espacio de diez años modifican su cuerpo doctrinario, la memorización tiene importancia relativa. Lo que interesa es desarrollar competencias para realizar análisis, desarrollar el sentido crítico, el hábito de pensar independientemente, y estimular para la creación.

La idea no es formar matemáticos, historiadores, químicos, etc., la ciencia no debe ser dada como tratado, sino como instrumento de aprendizaje de métodos. Lauro Oliveira Lima afirma que el programa tiene valor en cuanto a la funcionalidad de los datos suministrados en cada momento, para resolver los problemas.

Lo que se pide es que se enseñe a pensar, a manejar determinada disciplina y que los conocimientos y las informaciones cumplan el papel de herramienta de trabajo reflexivo.

La escuela por lo tanto debe presentar una propuesta pedagógica centrada en el desarrollo de competencias fundamentales para ir formando al ciudadano, prepararlo para que responda a las demandas de la vida adulta, pero también debe cumplir funciones propedéuticas para quienes deseen cursar estudios superiores, lo que representa no solamente un requerimiento académico, sino una demanda social.

¿no les parece???? pensemoslo juntos